6 raciones
Tiempo de preparación: 10 minutos
Tiempo de cocción: 25 minutos
Ø
1 cucharada de aceite de oliva
Ø
1 diente de ajo, finamente picado
Ø
2 tomates, pelados y troceados
Ø
1.2 litros de caldo de verduras
Ø
3 cucharaditas de pesto, mas un poco para servir
ralladura y zumo de 1 limon
Ø
100g de brécol, partido en ramitos, con los
tallos troceados
Ø
150g de calabacines, cortados en dados
Ø
100g de judías de soja verde congeladas
Ø
65g de pastas secas pequeñas
Ø
50g de espinacas, cortadas en tiras
Ø
Sal y pimienta
Ø
1 manojo de hojas de albahaca para decorar (opcional)
Caliente el aceite a fuego medio-bajo en una cacerola. Añada
la cebolla y sofríala 5 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que se haya
ablandado, agregue el ajo. Los tomates, el caldo, el pesto, la ralladura de limón
y un poco de sal y pimienta. Lleve a ebullición, reduzca el fuego y cueza a fuego lento durante 10 minutos.
Incorpore el brécol, los calabacines, las judías de soja y
la pasta y cueza a fuego lento 2 minutos más, o hasta que las espinacas se
hayan ablandado y la pasta este al dente.
Ponga la sopa en cuencos con un cucharon y eche por encima
unas cucharadas de pesto y unas hojas de albahaca. Sirva con focaccia caliente
de aceitunas o tomates secados al sol o con chapata o crujientes de parmesano.
Para preparar crujientes de parmesano, como acompañamiento
de la sopa, forre una placa de horno con papel sulfurado y disponga sobre ella
100g de parmesano rallado en 18 montoncitos bien separados. Introduzca la placa
en el horno precalentado a 190° C, y déjela 5 minutos, o hasta que el queso se
haya derretido y haya empezado a dorarse. Deje que se enfrié y se endurezca y
luego, retire el papel y sirva los crujientes de parmesano para acompañar la
sopa.
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